Compañías de Minería Bitcoin secuestraron la red eléctrica de Texas, denuncian expertos

La industria de la minería de Bitcoin, compuesta por poderosas compañías, no deja de causar polémica en los Estados Unidos. Algunas organizaciones denuncian que estas grandes empresas secuestraron la red eléctrica de Texas y demandan que se ponga un freno a esta actividad.

Algunos representantes republicanos comienzan a mirar con recelo el negocio en ese estado y un nuevo problema podría estar a la vuelta de la esquina. Lo curioso de esto, es que son los propios republicanos quienes promueven el negocio minero en su jurisdicción.

Compañías de minería de Bitcoin tienen enorme poder en Texas

Según un reporte publicado por The Economist, el sector de minería digital de Texas enfrentará problemas, incluso desde las filas republicanas. La red eléctrica del estado es cada vez más dependiente de las operaciones de estas empresas y los políticos y organizaciones ambientalistas ejercen presión.

Durante épocas de altos picos de consumo, las empresas mineras como Riot Platforms y otras se convierten en proveedoras de energía para las ciudades. Asimismo, también tienden a detener sus operaciones a cambio de un pago por parte de las autoridades. Básicamente, la distribuidora local de energía, ERCOT, paga a estas firmas para que detengan sus operaciones.

Representantes locales republicanos denuncian esta situación de dependencia. Sin embargo, los líderes cripto afirman que se trata de una relación de ganar-ganar. En consecuencia, pagar a las empresas mineras por la energía durante épocas de alto consumo es más rentable para las autoridades que generarla desde cero.

Nadie puede igualar los precios derivados de este acuerdo, expresa Lee Bratcher, del Blockchain Council, al mencionado medio. Para los detractores, esta realidad se debe abordar, dado que una industria particular no puede ser el árbitro de facto del sistema eléctrico. Así, la organización Tech Transparency Project, denuncia que las compañías de minería de Bitcoin mantienen secuestrada a la red eléctrica de Texas.

This example from @TheEconomist’s latest article on crypto mining in Texas is crazy. pic.twitter.com/OrC1qbTUCX

— Michael Thomas (@curious_founder) August 27, 2024

Un peligro mayor para Texas

Como ya se mencionó, algunos líderes republicanos se hacen eco de estas denuncia y alertan sobre los peligros de esta relación de dependencia. Por ejemplo, el vicegobernador, Dan Patrick, critica al sector minero por no producir suficientes empleos en relación con la magnitud del consumo de energía.

Otros representantes denuncian que se deben explorar mecanismos para detener una industria con estrechos vínculos con China. Como se puede notar, existe una tormenta que se gesta desde dentro de los principales entusiastas de esta industria, es decir, el partido republicano.

De producirse una arremetida, se trataría de un radical giro ideológico de los republicanos frente a un negocio que juran defender. De hecho, el candidato presidencial por ese partido, Donald Trump, reiteró recientemente que luchará incansablemente por proteger el derecho a la minería. Asimismo, el gobernador de Texas, Greg Abbot, se manifiesta como un fiel creyente de este negocio.

Es importante recordar que parte de su campaña electoral a gobernador se financió con dinero donado por empresas de criptomonedas. Mientras todo esto sucede, las compañías de minería de Bitcoin y de IA aumentan sus proyectos de centros de datos en Texas.

El promedio de costo por producir un BTC supera los $73.000 dólares. Fuente: MacroMicro

Un negocio rentable para las empresas mineras

Un elemento que salta a la vista de esta realidad en Texas, es que los negocios de las empresas mineras con el estado son notablemente rentables. Mientras la rentabilidad del sector minero digital pasa por un mal momento, los ingresos por venta o devolución de energía van en aumento.

Desde el halving del pasado mes de abril, el negocio minero sufrió un recorte de ganancias del 50%. Esta realidad empeoró con el mal desempeño del precio de Bitcoin, el cual alterna el estancamiento con una fuerte volatilidad. De tal modo, el costo de la producción de un Bitcoin está muy por encima de las ganancias por venta.

En el caso de RIOT, la empresa recibe un pago de ERCOT cada vez que detiene su producción y esa energía va a las ciudades. Este pago es demostradamente más rentable que continuar operando en la minería digital. Para agosto de 2023, por ejemplo, esta empresa percibió $32 millones en este acuerdo y solo $8.6 millones por la venta de BTC.

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