La revolución monetaria de China defi las probabilidades en el escenario mundial

El renminbi chino ha vivido un viaje salvaje este año, y no se debe sólo a las fluctuaciones de su valor, que parecen una montaña rusa. La moneda ha tenido un desempeño inferior, especialmente frente al dólar , con una depreciación del 8,5% desde sus mínimos de enero. Sin embargo, este aparente revés es parte de una historia más amplia y más intrigante: la creciente influencia del renminbi en el escenario mundial.

China emerge como un giro inesperado en las finanzas globales

En un giro sorprendente de los acontecimientos, el renminbi más débil ha ido ganando terreno en los pagos globales. De una modesta participación del 1,9% en los pagos globales a principios de año, se ha duplicado de manera impresionante al 3,6% en octubre de 2023.

Este crecimiento, aunque todavía pequeño en comparación con el dólar estadounidense y el euro dominantes, indica un cambio potencial en el panorama monetario mundial.

Es particularmente digno de mención considerando que China ha estado presionando para la internacionalización de su moneda desde 2004, pero con un éxito limitado hasta ahora.

Este aumento en el uso transfronterizo del renminbi se debe en parte a las medidas estratégicas de China para utilizar su moneda para acuerdos comerciales internacionales. Casi el 30% del comercio de bienes y servicios de China se liquida ahora en renminbi, un salto significativo con respecto a años anteriores.

Este cambio no se trata sólo de economía; También es una jugada de ajedrez geopolítica. China está reduciendo su dependencia del dólar estadounidense y otras monedas del G7, particularmente a raíz de las sanciones occidentales contra Rusia y la escalada de tensiones con Estados Unidos por Taiwán.

Ajedrez geopolítico y estrategias financieras

El impulso de China para internacionalizar el renminbi no ocurre en el vacío. Es una respuesta a un panorama global complejo, donde las estrategias financieras y geopolíticas se entrelazan. El desarrollo por parte del país de su propio sistema de pagos internacionales, Cips, es un ejemplo de ello.

Este sistema, que opera dent del sistema de mensajería interbancaria Swift, ha ganado trac , especialmente porque es más difícil de trac y, por lo tanto, potencialmente más trac frente a las sanciones occidentales.

Además, China ha estado estableciendo de manera proactiva swaps de divisas bilaterales con más de 30 bancos centrales. Estos swaps, que alguna vez estuvieron inactivos, ahora se están utilizando, como se vio en el retiro de 1.000 millones de dólares en renminbi por parte de Argentina para cubrir los reembolsos del FMI.

Los esfuerzos de China para impulsar la liquidez en renminbi en el extranjero a través de estos swaps y el establecimiento de centros de compensación de renminbi son parte de una estrategia más amplia para consolidar el lugar de su moneda en las finanzas internacionales.

Sin embargo, esta creciente influencia conlleva una salvedad. La falta de convertibilidad del renminbi plantea una barrera importante para su adopción más amplia.

Las empresas que ganan renminbi a través de las exportaciones encuentran limitadas sus opciones para utilizar la moneda, a menudo restringidas a comprar productos chinos o pagar deudas en renminbi. Esta dinámica aumenta la dependencia económica de otros países de China.

En contraste con su creciente importancia como moneda comercial, el renminbi está rezagado en su papel como moneda de inversión. La inversión extranjera en los mercados internos de China, particularmente en valores de renta fija, ha ido disminuyendo.

La falta de convertibilidad de la moneda, sumada al panorama económico y político único de China, hace que el renminbi sea una opción menos trac para los inversores extranjeros.

La revolución monetaria de China en el escenario global es una historia de paradojas y complejidades. La creciente presencia internacional del renminbi, impulsada por movimientos geopolíticos estratégicos e instrumentos financieros innovadores, contrasta con sus limitaciones como moneda de inversión.

Esta dicotomía refleja las ambiciones y desafíos más amplios de China a medida que navega por las complejidades de las finanzas globales. Mientras el renminbi continúa causando sensación, queda por ver cómo esta revolución monetaria remodelará el orden financiero mundial.

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