“No, el metaverso no ha muerto”, según cofundador de Animoca Brands
El concepto de metaverso ha surgido como un faro de innovación, pero a menudo se malinterpreta y se elogia prematuramente. Contrariamente a los rumores que se arremolinan sobre su desaparición, el metaverso se mantiene robusto, palpitante de potencial y prometedor.
Cuando se examina a través de la lente del compromiso global y la evolución de los derechos de propiedad digital, el metaverso parece estar ganando impulso.
El metaverso prospera lentamente
Yat Siu, cofundador de Animoca Brands, proporcionó a BeInCrypto valiosas ideas sobre por qué el metaverso está sobreviviendo y prosperando. Según Siu, el metaverso trasciende el escapismo virtual y encarna el siguiente gran salto en la evolución de Internet: los derechos de propiedad digital.
Este cambio de paradigma otorga a los usuarios la propiedad de sus activos digitales y contribuciones en línea, lo que supone un cambio significativo respecto al consumo tradicional y pasivo de contenidos digitales.
El crecimiento del metaverso se sustenta en importantes avances tecnológicos y cambios culturales, sobre todo en la forma en que percibimos e interactuamos con los entornos digitales. Siu explicó a BeInCrypto que adoptar esta tecnología significa entenderla como una Internet descentralizada, o Web 3.0, que facilita la verdadera propiedad digital.
Este concepto revolucionario ya ha empezado a remodelar las interacciones en línea, otorgándoles nueva profundidad, autenticidad y valor económico. Siu afirmó:
“Con la introducción de los derechos de propiedad digital en el metaverso, las interacciones adquieren sentido y significado. Nuestros activos e historias digitales se están convirtiendo en parte de nuestras identidades sociales, lo que nos permite tener interacciones arraigadas en una historia compartida verificable. Esta autenticidad es algo que ya hemos experimentado en los videojuegos, pero el metaverso promete elevarla.”
Además, el metaverso no se limita a lo abstracto o puramente digital. Se cruza significativamente con el mundo físico, sobre todo a través de iniciativas que tienden puentes entre las actividades virtuales y el ejercicio físico en el mundo real. Siu añadió:
“La suposición de que la actividad digital debe traducirse en inactividad física no es necesariamente correcta. Por ejemplo, un informe citado por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades muestra que los adultos estadounidenses eran más activos físicamente que dos décadas antes, durante un periodo en el que el mundo -incluido Estados Unidos- abrazó plenamente el estilo de vida digital.”
Según Siu, empresas como GOQii, Sweatcoin y OliveX aprovechan la tecnología blockchain para fomentar la salud y la actividad. Desmontando así el mito de que la inmersión digital equivale a inactividad física.
Metaverso: El mundo se vuelve digital
Las implicaciones económicas del metaverso son profundas: la capitalización del mercado mundial de criptomonedas -una de las piedras angulares de Web 3.0- supera los 1,64 billones de dólares. De hecho, esta economía en crecimiento invita a las empresas a mirar más allá de las estrategias convencionales y sumergirse en el ecosistema cultural y económico del metaverso.
Esta inmersión requiere una comprensión matizada de la propiedad digital, la creación de comunidades y el valor de las interacciones virtuales.
Sin embargo, Siu destacó que la dimensión ética del metaverso también es primordial. Al igual que las industrias del cine y los videojuegos navegan por los límites éticos, el metaverso debe establecer directrices. El objetivo es garantizar que siga siendo un espacio para la participación positiva y no un refugio para comportamientos nocivos.
Sin embargo, el reto consiste en equilibrar la libertad y la creatividad con la responsabilidad y las normas éticas:
“El contexto es crucial. Las representaciones de acontecimientos históricos, incluso las que implican figuras o acciones aborrecibles, pueden servir a fines educativos y narrativos. La inclusión de contenidos controvertidos en el metaverso debe abordarse con el mismo grado de adecuación y sensibilidad que en otros medios”, subraya Siu.
La dinámica cultural y económica del metaverso ya está influyendo en sectores que van más allá de la tecnología. Por ejemplo, marcas de lujo como Gucci y Tiffany & Co. son pioneras en la adopción de NFT y activos digitales. Estos avances ponen de relieve el papel del metaverso en la redefinición del valor, la comunidad y la identidad en la era digital.
Volumen negociado por NFT. Fuente: IntoTheBlock
Los NFT alimentan el mercado del metaverso
Los NFT, como almacenes digitales de cultura, ponen de relieve la capacidad de reflejar la complejidad y riqueza de la propiedad física en el mundo virtual. Siu declaró:
“La mayoría de los jóvenes pasan mucho tiempo en línea y su sentido del valor ya incorpora lo digital. Al entrar en el metaverso y poseer NFT o activos similares, las marcas pueden hablar directamente con sus fans y clientes fieles de una forma que era imposible en la era de la Web 2. Esto hace que el marketing sea más directo, sencillo y rentable. Esto hace que el marketing sea más directo, eficiente y menos costoso sin una plataforma de terceros.”
A pesar del escepticismo y la volatilidad inherentes a los mercados emergentes, la trayectoria del metaverso apunta hacia el crecimiento y la integración en la corriente dominante.
Siu cree “inequívocamente” que el “metaverso es el futuro”. Tal convicción está respaldada por el impresionante aumento del volumen de ventas de NFT y la adopción estratégica del metaverso por parte de diversas industrias. Por tanto, refuerza la noción de que el mundo asiste a los albores de una era digital transformadora.