Rampas de pago fiat y socios bancarios son cruciales para adopción institucional de Web3
Las pasarelas de pago fiat y los servicios neobancarios se están convirtiendo en un engranaje vital para impulsar la adopción y aceptación generalizada del amplio espacio de las criptomonedas, según figuras clave del sector en la intersección de las finanzas tradicionales y Web3.
Ejecutivos de OpenPayd, Ramp Network y Damex analizaron la creciente importancia de las plataformas bancarias y de pago de terceros en una conversación con Cointelegraph durante la reciente Convención Europea de Blockchain celebrada en Barcelona.
La CEO de OpenPayd, Iana Dimitrova, explicó cómo su empresa procesa más de 3,000 millones de euros de volumen de transacciones mensuales y ha emitido más de dos millones de cuentas, entre las que se incluyen varios criptoexchanges destacados, como Crypto.com.
Como explicó Dimitrova, la oferta principal de OpenPayd es la infraestructura bancaria y de pagos para diversos sectores, incluido el de las criptomonedas.
“La realidad es que existe un creciente nivel de desconfianza tanto por parte de los reguladores como de los holders tradicionales de acceso a las vías de pago, ya sean SEPA o SWIFT, bancos o sistemas que gestionan las vías de pago en lo que respecta al mundo de las criptomonedas”, afirmó Dimitrova.
La CEO añadió que las rampas de acceso al dinero fiat y las vías de pago podrían cubrir la brecha al abordar las preocupaciones en torno a la identidad y la trazabilidad, “ergo el lavado de dinero”, que, según ella, sigue siendo una percepción que tienen las instituciones financieras tradicionales y los reguladores.
Samuel Rondot, director general de Damex, explicó que la empresa, con sede en Gibraltar, está especializada en ofrecer rampas de entrada y salida de dinero fiat “clientes de alto riesgo”, como iGaming, Forex, oficinas familiares y fondos de cobertura. La empresa suele convertir grandes cantidades de criptomonedas a dinero fiat y viceversa en euros, libras esterlinas y dólares estadounidenses.
Los clientes de Damex se enfrentan casi a diario a problemas de reputación con sus cuentas bancarias porque quieren interactuar con el ecosistema de las criptomonedas. Reflexionando sobre por qué los bancos siguen siendo “alérgicos a las criptomonedas”, Rondot sugiere que el problema proviene de un malentendido “de la herramienta y el principio”.
Esto ha llevado a la creación de servicios como OpenPayd y Ramp, que están empezando a desempeñar el papel de actores especializados que entienden y facilitan los procesos contra el lavado de dinero y de conocimiento del cliente y actúan como terceros, “blindando” a los bancos tradicionales de tratar directamente con negocios relacionados con criptomonedas.
“Digamos que haces un pago de criptomonedas a dinero fiat con un IBAN de OpenPayd. Luego mueves este dinero hacia tu cuenta bancaria principal. Es un proceso completamente diferente, y el banco no tendrá ningún problema con ello”, dijo Rondot.
El ejecutivo de Damex destacó la importancia de estos servicios para llevar a cabo la investigación necesaria, junto con la voluntad de hacer negocios con empresas relacionadas con las criptomonedas, para permitir que el dinero fiat fluya entre las finanzas tradicionales y los ecosistemas financieros descentralizados.
Szymon Sypniewicz, cofundador y CEO de Ramp Network, explicó que sus servicios ofrecen una plataforma de interfaz de programación de aplicaciones (API) única para el sistema fiduciario mundial. La API y el kit de desarrollo de software de Ramp proporcionan acceso a una configuración tecnológica que cumple la normativa y permite a los usuarios comprar y vender criptomonedas en todo el mundo.
Como explica Sypniewicz, la infraestructura de Ramp permite a las empresas relacionadas con las criptomonedas ofrecer tarjetas de crédito, tarjetas de débito, métodos de pago locales y funcionalidad de transferencia bancaria para que los usuarios adquieran criptomonedas o paguen servicios:
“El objetivo es que la transición a los productos con criptomonedas sea tan suave y fluida que la gente deje de notar que está interactuando con una configuración tecnológica completamente nueva.”
Cuando se les pregunta por las dificultades que encuentran las empresas criptonativas para abrir cuentas bancarias o acceder a vías de pago, los tres destacan la brecha entre las tecnologías financieras emergentes y las existentes como un continuo punto de dolor.
“Supongo que uno de los principales retos que vemos es que la tecnología bancaria de los bancos tradicionales no se corresponde realmente con el nivel de innovación, velocidad y agilidad que requieren todos sus productos y clientes”, afirma Dimitrova.
Añade que esa es una razón de peso para que existan proveedores de infraestructuras que puedan agregar diferentes vías de pago, diferentes bancos y diferentes canales.
“Podemos ir a Szymon y darle una API única y permitirle acceder a múltiples países, múltiples jurisdicciones, múltiples divisas y tendrá un nivel equivalente de servicio y experiencia en todos los ámbitos”.
Sypniewicz añade que la dificultad de que las criptoempresas se bancaricen se reduce a lo especializadas que estén. Plataformas como Ramp actúan como “especialistas en tecnología regulatoria”, agregando docenas de bancos globales y socios proveedores de pagos.
“Toda la normativa en la que hay que especializarse para poder cumplir los requisitos la cumplimos fundamentalmente nosotros. El usuario final puede tomar sus criptomonedas e interactuar con su plataforma, monedero, mercado de NFT o productos DeFi de nueva generación.“
Las normas de cumplimiento son otro requisito previo para una mayor adopción y aceptación de los negocios criptonativos. Sypniewicz, Dimitrova y Rondot coincidieron en que el marco de Mercados de Criptoactivos (MiCA) de la Unión Europea proporcionará un marco común para que los agentes de Web3 y TradFi operen con mayor facilidad.
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