¿Tiene recorrido el ‘rally’ del bitcoin? “No es buena idea comprar tras un repunte”
El mercado de las criptomonedas está cerca de vivir un momento histórico. Después de haber subido algo más de un 20% en la última semana, alrededor de un 40% en lo que llevamos de 2024, y haber roto la barrera de los 60.000 dólares, el bitcoin (BTC) se está preparando para romper los máximos históricos que marcó en noviembre de 2021 cuando alcanzó los 69.000 dólares. Además, hay una serie de factores que parecen haberse alineado para catapultar a la criptomoneda reina hasta las 6 cifras en el medio plazo. No obstante, ¿tiene recorrido a corto plazo el repunte actual?
Laith Khalaf, jefe de análisis de inversiones de AJ Bell, destaca que el actual camino alcista podría continuar, ya que “el éxito tiende a generar éxito a corto plazo”. “Superar los 60.000 dólares generará muchas columnas y atención pública, atrayendo probablemente a nuevos inversores y creando un vórtice ascendente”, afirma este experto. No obstante, Khalaf también destaca que “no suele ser una buena idea comprar a raíz de un repunte de los precios”.
“Episodios anteriores han demostrado que los que entran cuando el frenesí alcanza su punto máximo sufren pérdidas extremas. Desde máximos de más de 60.000 dólares en 2021, bitcoin cayó a unos 17.000 dólares el año pasado. Aunque ahora está a punto de recuperar el terreno perdido, el futuro a largo plazo de las criptomonedas aún pende de un hilo“, advierte el estratega de AJ Bell.
Según Khalaf, esto se debe a un factor importante que normalmente se suele pasar por alto a la hora de realizar este tipo de análisis: la adopción de consumidores, empresas e inversores. En este sentido, subraya, su volatilidad “no ayuda a consolidar su estatus como moneda” y, “aunque puede haber una fiebre inicial por comprar fondos cotizados (ETF, por sus siglas en inglés), es probable que los inversores institucionales se muestren bastante cautelosos a la hora de incluir criptomonedas en sus carteras“. “También es probable que en los próximos años se generalice el lanzamiento de monedas digitales de los bancos centrales (CBDC, por sus siglas en inglés), lo que podría socavar la conveniencia de mantener criptomonedas”, agrega.
“El resultado final de bitcoin es bastante binario. O se convierte en una parte aceptada del mobiliario financiero y en un activo valioso, o acaba en la basura. La volatilidad de los precios refleja en parte la batalla en curso entre estas dos visiones posibles y polarizadas del futuro de las criptomonedas. Es imposible predecir con seguridad cuál prevalecerá. Como siempre, los inversores que quieran invertir dinero en bitcoin deberían estar dispuestos a perderlo en su totalidad en el peor de los casos”, sentencia.
OPTIMISMO DESBOCADO… ¿TAL VEZ DEMASIADO?
Sea como fuere, lo cierto es que la sensación predominante en el espacio de los activos digitales es otra. Son pocos los que piensan en que el ‘rally’ tenga las piernas cortas y, como destaca Ipek Ozkardeskaya, analista sénior de Swissquote Bank, parece haber un claro caso de FOMO (miedo a perderse algo) instaurado en el mercado. En concreto, un miedo a no estar cuando el bitcoin supere los 100.000 dólares (si lo hace).
La sensación, en este caso, parece que se corresponde con los datos. Y es que el Índice de Miedo y Codicia Cripto (‘Crypto Fear & Greed Index’) ha escalado recientemente por encima de los 80 puntos, un nivel que no se veía desde antes de noviembre de 2021. Según esta referencia, la situación en el mercado es de “extrema codicia” y ello puede indicar dos cosas: o un aumento de las compras y una extensión del ‘rally’, o una inevitable caída de los precios.
Esta referencia toma en cuenta seis indicadores clave (volatilidad (25%), impulso y volumen del mercado (25%), medios sociales (15%), encuestas (15%), dominio de bitcoin (10%) y tendencias (10%)) para medir el sentimiento del mercado cada jornada. Una lectura a la baja de esta referencia puede indicar un “miedo extremo” que puede ser interpretado como una señal de que los inversores están demasiado preocupados y suele ser entendido como una oportunidad de compra. Al contrario, un amplio sentimiento de “codicia” puede indicar que el mercado está a punto de sufrir una corrección.
LOS ETF SIGUEN BRILLANDO
Con todo, caiga o suba el bitcoin, la impresionante escalada alcista ha sido real. Para Ozkardeskaya, “tiene sentido” desde un punto de vista de los fundamentos que la criptomoneda reina haya subido tanto. Y es que esta experta señala que la creciente limitación de la oferta, el rápido aumento de la demanda o la negativa de muchos inversores a vender su bitcoin (un 70% no se ha movido en más de un año) están empujando los precios al alza. Pero, sobre todo, el mayor impulso lo están recibiendo de los ETF.
Por un lado, los fondos cotizados están rompiendo todos los registros habidos y por haber liderados por un iShares Bitcoin Trust (IBIT) de BlackRock que parece no conocer ningún límite. Según datos de Eric Balchunas, analista de ETF de Bloomberg, el volumen de negociación de este fondo cotizado ascendió a más de 3.000 millones de dólares el pasado miércoles después de dos días seguidos superando los 1.000 millones.
“Es ridículo. Es un número disparatado”, aseguraba en su cuenta de X (antigua Twitter) este experto. Asimismo, Balchunas y su compañero James Seyffart han constatado que los 10 grandes ETF siguen registrando sus mejores días en lo que a flujos de entrada de capitales se refiere, pero también en el volumen negociado, llegando a superar la barrera de los 8.000 millones de dólares en un día.
“Desde su lanzamiento, los ETFs del bitcoin al contado, los fondos han acumulado tenencias que representan más del 3% de todos los bitcoins existentes actualmente. Este hito resalta una tendencia creciente de inversores institucionales que desean exponerse al bitcoin“, asegura Simon Peters, analista experto en criptoactivos de eToro. De su lado, Manuel Villegas, analista de Julius Baer, opina que estos productos de inversión dibujan un “telón de fondo fundamental muy sólido” para la criptomoneda reina, sobre todo si los bancos centrales cumplen con lo esperado y bajan los tipos de interés este año.
EL ‘HALVING’, PRUEBA DE ESTRÉS Y OPORTUNIDAD
Por otro lado, la proximidad del ‘halving’ o reducción a la mitad de la red Bitcoin que tendrá lugar en abril también está echando gasolina al fuego. Este será la cuarta vez que la cadena de bloques atraviesa este proceso tras las vividas en 2012, 2016 y 2020 y aumentará la escasez del BTC al reducir la recompensa por bloque minado a la mitad, hasta los 3,125 BTC.
Los primeros efectos ya se están notando desde hace tiempo, ya que las compañías mineras han intensificado el proceso de venta de sus activos, ya que, tras el ‘halving’, sus ingresos por bloque se reducirán —como ya hemos dicho— a la mitad. Los datos rastreados por Glassnode muestran que el número estimado de BTC en carteras vinculadas a mineros cayó en 8.426 BTC (530 millones de dólares) desde el comienzo del año hasta 1.812.482 BTC.
Según los expertos, es probable que las mineras utilicen sus BTC almacenados para mejorar la rentabilidad (ingresos por bloque minado) comprando equipos más eficientes que permitan una reducción de los costes de funcionamiento. La reducción a la mitad se considera una prueba de estrés para los mineros, ya que se espera que reduzca los ingresos y aumente los costes de producción simultáneamente. Además, algunos analistas creen que es posible que el sector atraviese un proceso de consolidación.
Por otro lado, el ‘halving’ puede volver a generar un ciclo alcista en las semanas previas y posteriores a su compleción, como ha ocurrido en las tres ocasiones anteriores. De ahí que se esté viendo un creciente interés por comprar bitcoin ahora antes de que, en teoría, vuelva a subir: un año después del primer ‘halving’, el bitcoin pasó de 12 dólares a casi 1.000 dólares; tras el segundo, subió hasta los 2.550 dólares; con el tercero, bitcoin pasó de 8.700 dólares a un máximo de 19.700 dólares en diciembre de 2020.
Si bien la opinión mayoritaria es que los precios van a subir, hay voces que piden calma. Es el caso de Rania Gule, analista de XS.com, quien destaca que se han añadido “más de 10.000 millones de dólares a su valor de mercado en solo 17 días” y que el bitcoin podría estar sobre comprado; además, “el ‘halving’ ha causado fluctuaciones en el precio, incluida una caída antes del acontecimiento”, algo que ve probable que se repita.
Por su parte, Peters cree que la subida podría no ser “tan significativa” como algunos esperan, ya que la ganancia porcentual ha ido reduciéndose de forma progresiva con cada uno de estos eventos. A su vez, Ozkardeskaya cree que la alta especulación en torno a este evento puede generar unas fluctuaciones “muy elevadas” y destaca que una caída del 20% no está fuera de la mesa.
Aún así, estas voces más cautas no solo coinciden en que el repunte a corto plazo puede ser menor del previsto, sino también en la escalada del bitcoin a medio y largo plazo. Y es que, salvo sorpresa, estos analistas parecen tener claro que la barrera de los 100.000 dólares se terminará rompiendo este mismo año. “La llegada de los fondos cotizados (ETF, por sus siglas en inglés) de BTC al contado ha hecho que la clase de activos sea más invertible para los grandes inversores. Si la correlación de BTC con las clases de activos tradicionales disminuye, y si los movimientos de precios se producen en función de los fundamentos del sector, sería un activo de diversificación interesante para las carteras tradicionales”, concluye Ozkardeskaya.